De a pie Miércoles, 6 noviembre 2019

Esta es la razón por la que mañana Lima amanecerá en crisis

Esta mañana, las empresas concesionarias del servicio de corredores complementarios —el Corredor Azul (Tacna-Wilson-Arequipa), Rojo (Javier Prado), Morado (SJL) y Amarillo (Universitaria-Evitamiento-Panamericana Sur) — han anunciado la suspensión del servicio.

Mañana va a ser un día de damier. Foto: Captura/Twitter

Mañana va a ser un día de damier. Foto: Captura/Twitter

Para entender por qué les dejamos un post de Peruanos de a Pie:

Título original: La suspensión de los Corredores Complementarios

Lima viene arrastrando una pésima administración del transporte público concesionado, el cual arrancó en 2014 con muchísimos problemas pero que poco a poco debía ir mejorando. Sin embargo, eso no fue así: durante la tercera gestión de Castañeda (2015-2018) se detectaron problemas legales en los contratos de licitación de rutas y del recaudo electrónico debido a una confusa interpretación del entonces vigente Decreto Legislativo N° 1012, respecto de la intervención del Ministerio de Economía y Finanzas en el contrato.

Saben que somos la tercera ciudad del mundo con más tráfico, ¿no? Foto: El Comercio

Saben que somos la tercera ciudad del mundo con más tráfico, ¿no? Foto: El Comercio

El problema de la recaudación

Producto de ello, la ciudad se quedó sin un sistema de recaudo centralizado y el cobro empezó a realizarse en efectivo en el bus. Ello implica, en términos operativos, que se retrasa el tiempo de operación toda vez que el conductor cobra la tarifa y da el vuelto en efectivo, lo cual a su vez deriva en un alto porcentaje de merma en la recaudación (30%).

Las metidas de cabe

En abril de 2016, se resolvió el contrato de concesión del corredor Tacna – Garcilaso – Arequipa (Corredor Azul) firmado con el consorcio TGA, empresa que tenía la mayor cantidad de unidades en el corredor.

Ese mismo año, Protransporte declara nula la concesión del corredor Javier Prado (Corredor Rojo) firmado con el consorcio Javier Prado Express, otra empresa con la mayor cantidad de unidades en el corredor y con una buena política laboral con los conductores y personal al servicio.

Tó Javier Prado. Foto: Quiosco Peru

Tó Javier Prado. Foto: Quiosco Peru

El resto de contratos de licitación de rutas tuvo que pasar nuevamente por el visto bueno del MEF, ello debido a que el posterior y entonces vigente Decreto Legislativo N° 1224 aclara las reglas de las concesiones y porque fueron diseñados como asociaciones público privadas autosostenibles. Esto último significa que para desarrollar la iniciativa privada, esta no le debe costar ni un sol al tesoro público.

Adicionalmente, hay que precisar que la inversión por parte de la Municipalidad de Lima era mínima, tal como dotar de orientadores y fiscalizadores. Esto a diferencia del Metropolitano, donde la Municipalidad de Lima pone la infraestructura y el privado la operación de los buses y el recaudo de la tarifa.

La reforma que no fue

Además hay que reconocer que los consorcios son el resultado de las complejas y difíciles reuniones que se dieron todo el 2011-2014 con los dueños de las empresas de transporte convencional para que transformen su modelo empresarial y dejar así, el sistema comisionista afiliador y por ende, la guerra del centavo.

Durante el 2015-2018, se implementó el corredor morado con rutas recortadas y compitiendo con el transporte tradicional, el corredor amarillo, y el corredor verde, este último con serios problemas por lavado de activos.

El drama es real. Foto: Captura/Twitter

El drama es real. Foto: Captura/Twitter

A su vez, la Gerencia de Transporte Urbano de Lima de ese entonces, siguió renovando autorizaciones a las empresas de transporte tradicional, descuidando progresivamente la supervisión de la calidad del servicio de los corredores complementarios y sin nuevas licitaciones de los contratos anulados.

El 28 de diciembre de 2018 se publica la Ley N° 30900 que crea la Autoridad de Transporte para Lima y Callao, con la cual las competencias de Protransporte y la GTU de Lima, y su equivalente en Callao, pasan a competencias de un nuevo organismo dependiente del Ministerio de Transportes y Comunicaciones. Esta trasferencia sigue en curso y los contratos siguen teniendo de contraparte a Protransporte.

En 2019 se inició el recaudo electrónico LimaPass, como una acción privada de los operadores de los corredores complementarios, sin que sobre ello la Municipalidad de Lima tenga alguna intervención o supervisión.

Sin agenda, sin infraestructura

Como señala Matteo Stiglich, esto al día de hoy permite darnos cuenta que hay un problema de origen (la falta de carriles exclusivos para los corredores) y que viene de una cuestión política —recuérdese de la oposición de la Municipalidad de San Isidro en el 2014 para que la Avenida Arequipa sea un carril exclusivo para el Corredor Azul—, así como la falta de presupuesto para infraestructura para el transporte público.

El pico y placa, de autos y luego de camiones, pone en agenda el orden de prioridades para la autoridad de turno, donde el transporte público no juega ningún rol importante.

Que los colectivos hayan absorbido gran parte de los viajes de los corredores complementarios, es justamente porque los corredores no tienen una velocidad comercial atractiva, porque los corredores no tienen carriles exclusivos, o por ejemplo, en partes de Javier Prado Este —luego del pico y placa—, el corredor rojo debe compartir el carril auxiliar con todos los autos, ya que el carril auxiliar no hay pico y placa.

Es el fin. Composición: Utero.pe

Es el fin. Composición: Utero.pe

Esperamos que se pueda mejorar el transporte público de la ciudad, porque es el que usa la mayoría de los ciudadanos para desplazarse y que es un servicio público escencial.